Características principales de la financiación pública Origen de los fondos. Los recursos provienen de presupuestos públicos, es decir, del dinero recaudado por el Estado a través de impuestos, tasas y otros tributos. Finalidad. Suele estar orientada a fomentar el desarrollo económico, la innovación, la investigación y el desarrollo tecnológico (I+D+i), la internacionalización, la sostenibilidad ambiental y el apoyo a sectores estratégicos o a empresas con alto potencial de impacto social. Formas de financiación. Subvenciones y ayudas directas. Fondos que no requieren devolución, destinados a proyectos específicos o a la creación y consolidación de empresas. Préstamos públicos. Créditos con condiciones más favorables que los del mercado privado, como tasas de interés bajas, plazos de devolución flexibles y períodos de carencia. Créditos avalados y garantías públicas. Facilitan el acceso al crédito para pymes y autónomos, mejorando su solvencia y posibilidades de financiación. Capital de riesgo público. Inversión directa en empresas a cambio de participación, especialmente en sectores innovadores. Bonos y otras formas. Emisión de deuda respaldada por el Estado o entidades públicas. Ventajas. Condiciones más favorables que la financiación privada, posibilidad de obtener anticipos, tramos no reembolsables, deducciones fiscales, y acceso a recursos para proyectos que pueden tener dificultades para financiarse en el sector privado. Requisitos y control. Los beneficiarios suelen estar sujetos a auditorías, justificación del uso de fondos y cumplimiento de objetivos y plazos, con un alto grado de transparencia y control por parte de la administración pública.